Intercambio con el colegio Institution Sainte Marie d’Antony
El colegio Nuestra Señora del Pilar de Valencia organiza desde hace más de 12 años un intercambio con el colegio Institution Sainte Marie d’Antony, municipio de la región parisina.
Se trata de un colegio concertado, católico marianista, de más de 3.500 alumnos.
La actividad consta de dos partes. En primer lugar, los alumnos españoles viajan a Antony y durante su estancia en familias se les propone un programa de visitas. Dicho programa viene contrastado con el curriculum de 4ºeso: historia, arte, literatura…
En segundo lugar, a la inversa, en Valencia los alumnos franceses son acogidos por las familias de sus corresponsales y visitan la ciudad siguiendo un programa adecuado a sus estudios en Francia.
Por todo ello, consideramos que dicha actividad tiene un gran valor para los 25 alumnos que participan en ella. En efecto, el intercambio no se limita a los viajes sino que permite un contacto constante entre los alumnos que se extiende a lo largo del curso y en ocasiones va más allá de lo puramente académico creando lazos de amistad.
La gestión de esta actividad se lleva a cabo teniendo presente los siguientes objetivos:
1. Enriquecimiento cultural
Se plantea la actividad como un viaje a la vez lingüístico y cultural. Por una parte, se practica la lengua; por eso la estancia en familias. En esa línea, se organizan visitas en lengua francesa para que los alumnos se ejerciten en la variedad fonética y de pronunciación de los diferentes guías. Por otra, se visitan los monumentos y lugares más característicos y emblemáticos de Paris y de la cultura francesa.
2. Inmersión lingüística
La convivencia en familia durante diez días favorece el progreso y la mejora en la práctica del idioma. Con este viaje, el alumno pone en práctica y consolida los conocimientos adquiridos en los últimos cursos, así como en las actividades de preparación previas (correos, conversaciones, etc.). El viaje también permite potenciar las
habilidades del alumno. Gracias a esa inmersión lingüística, el alumno adquiere mayor fluidez y enriquece su vocabulario. También mejora la comprensión y la expresión puesto que se ve obligado a hablar y eso le hará progresar.
3. Convivencia para la formación integral de la persona
Los alumnos aprenden a convivir con otra familia que los acoge y eso les ayuda a madurar. También cuando acoge en su casa, el alumno se responsabiliza y se preocupa de que su corresponsal esté bien atendido y lo pase lo mejor posible. En ambos casos, españoles y franceses salen du su día a día para conocer costumbres ajenas y adaptarse a ellas. En ese sentido les ayuda a desenvolverse solos, a adaptarse y, en definitiva, a madurar y crecer como personas.
4. Adaptación a otras costumbres
Es importante que los alumnos sean receptivos y positivos ante las costumbres de su familia de acogida. La vida en Francia y en España es muy distinta: unos y otros tendrán que aceptar esas diferencias para adaptarse y sacar el mejor partido de ellas. Se aprende mejor y se disfruta más con una actitud abierta.
5. Trabajo y esfuerzo
Los alumnos españoles, así como los franceses cuando nos visitan, llevan una guía de viaje que tienen que trabajar diariamente. En ella aparecen las visitas que se efectúan y cada alumno redacta una descripción de las actividades realizadas y las impresiones que le sugiere.
Además, las actividades programadas, tanto en Francia como en España, están vinculadas al currículo de 4º ESO: Lengua francesa y literatura, Historia y Geografía, Historia del arte, Ciencias naturales, Latín y Cultura clásica…