El cambio de milenio
Odres nuevos para vino nuevo
Cuando parecía que el espacio no daba para más, la Historia le ha hecho sitio y el Colegio, “adaptándose a los tiempos” y a las necesidades, ha seguido creciendo en volumen, espacios e Historia.
Esta última etapa comenzó con la celebración jubilosa de la esperada beatificación del Fundador en octubre del año 2000, que no solo dio alegría, sino que significó un impulso renovador para los nuevos tiempos, “Odres nuevos para vino nuevo”
A los pocos años, en el curso 2008/9, celebramos los 75 años de presencia marianista en Valencia; durante un curso y con distintos eventos recordamos con júbilo el compromiso de los marianistas con Valencia y los valencianos durante tantos años y la reafirmación de dicho compromiso con nuevos proyectos.
El curso 2009/10, se abordaron las obras necesarias para poder responder a una necesidad colegial y una vieja reivindicación de familias y profesores: la implantación de la Ed. Infantil y la construcción de un Pabellón Polideportivo Cubierto.
A partir el curso 2011/12 el Colegio del Pilar podía ofrecer a las familias la más amplia oferta educativa y deportiva posible con las nuevas instalaciones y la autorización para impartir la Ed. Infantil y la Educación Especial a través de los Grupos de Apoyo a la Integración que fueron aumentando en los años siguientes de los niveles de Infantil a Primaria y Secundaria.
Desde sus orígenes en esta ciudad han ido saliendo numerosas promociones de alumnos, a las que se procura ofrecer un ideal humano y cristiano, impregnado por el espíritu y la presencia de María, tradicional en la educación marianista.
Este artículo fue escrito por José María Salaverri S.M. y completado por Carlos Ferrer.